Es una de las verdades universales: ser bilingüe o políglota sólo puede considerarse algo positivo. Tienes la capacidad de viajar constantemente a otro país, de interactuar con gente con la que si no no podrías comunicarte, de entender de verdad otra cultura, de sumergirte en ella (sea o no sea la tuya propia), y, en otro orden de cosas, de pedir un menú y saber realmente lo que estás pidiendo.
Además de estas razones, existen múltiples investigaciones que demuestran que hablar más de una lengua también es bueno para tu salud, especialmente, para la salud de tu cerebro. Aquí tienes los motivos por los que ser bilingüe tiene más de una ventaja.
1. Mejor “flexibilidad cognitiva”
Según un estudio de The Journal of Neuroscience, los adultos que han hablado dos lenguas desde su infancia tienen mejor flexibilidad cognitiva, es decir, tienen más facilidad para adaptarse a una circunstancia nueva o inesperada que los adultos que sólo hablan una lengua. En el estudio, los participantes tenían que completar una tarea de flexibilidad cognitiva; aunque tanto los adultos monolingües como los bilingües fueron capaces de completarla, los bilingües lo hicieron con más rapidez y además determinadas partes de su cerebro necesitaron menos energía para llevarla a cabo.
2. Agilidad mental durante más tiempo
Esto también se cumple en las personas que aprenden una segunda lengua siendo ya mayores, de acuerdo con un reciente estudio publicado en Annals of Neurology. En la investigación, se realizaron tests de inteligencia a los participantes, hablantes nativos de inglés, cuando tenían 11 años y unas décadas después, cuando cumplieron los 70. La gente que hablaba dos o más lenguas mostró mejores capacidades cognitivas (especialmente en los tests de inteligencia general y de lectura) con respecto a su nivel de base en comparación con las personas que sólo hablaban una lengua.
3. Las palabras se ven de forma diferente a como lo hacen los monolingües
La gente que habla dos lenguas puede procesar ciertas palabras más rápido, sobre todo si dicha palabra tiene el mismo significado en ambas lenguas, según un estudio de Psychological Science. Gracias a la tecnología de movimiento ocular, los investigadores descubrieron que las personas bilingües pasan menos tiempo observando los llamados “cognados” (palabras de distintos idiomas que comparten la misma raíz morfológica, como por ejemplo, “lune” en francés y “luna” en español), lo que sugiere que su cerebro necesita menos tiempo para procesar la palabra, explicaba Scientific American.
4. No hay inmunidad al Alzheimer, pero sí se desarrolla de forma más tardía
Cualquiera puede padecer Alzheimer, pero las personas bilingües desarrollan esta enfermedad cuatro o cinco años más tarde que las monolingües, de acuerdo con los descubrimientos presentados en el encuentro de 2011 de la American Association for the Advancement of Science. En el estudio participaron 450 pacientes con Alzheimer, la mitad de los cuales habían hablado dos lenguas la mayor parte de sus vidas.
5. Los niños resuelven mejor los problemas
Parece que los niños bilingües realizan mejor las tareas que implican creatividad y capacidad de resolución de problemas, según una investigación publicada en el International Journal of Bilingualism. En el estudio participaron 121 niños, la mitad bilingües, y se les pidió que completaran tareas relacionadas con la repetición de series de números, la resolución mental de problemas matemáticos y la reproducción de patrones con bloques de color, explicaba HealthDay.
6. Su cerebro cambia de tarea con más facilidad
Los niños bilingües pueden ser más rápidos al cambiar de tarea, de acuerdo con un estudio de Child Development. En el estudio, tanto niños bilingües como monolingües tenían que observar imágenes de animales o figuras de colores en una pantalla de ordenador. Cuando a los niños se les pidió que pulsaran un botón para cambiar de las imágenes de animales a las imágenes de colores, los niños bilingües lo hacían más rápido.
7. La capacidad de pensar en otra lengua ayuda a tomar decisiones más razonadas
Cuando la gente piensa en otra lengua tiene más probabilidades de tomar una decisión racional en una situación problemática, según una investigación de 2012 de la revista Psychological Studies. Debido a que las personas, por naturaleza, son reacias a la pérdida, tienden a tomar decisiones que la minimicen, aunque la balanza esté inclinada a su favor. No obstante, investigadores de la Universidad de Chicago descubrieron que cuando la gente piensa en una lengua extranjera, esto les da distancia, lo cual les ayuda a tomar decisiones más deliberadas y menos dependientes de las emociones. “Quizás el factor más importante es que una lengua extranjera tiene menos resonancia emocional que la lengua materna”, comentaba Sayuri Hayakawa, investigadora del estudio. “Una reacción emocional puede conllevar decisiones motivadas por el miedo más que por la esperanza, aunque las probabilidades nos sean muy favorables”.
Nota e imágenes tomadas del www.huffingtonpost.es
Amanda L. Chan
EL HUFFINGTON POST
Traducción de Marina Velasco Serrano